Mil novecientas sesenta conchitas
La forma de hacer la cama y no perder el meneíto:
¡Ah, chicas de arrastre, de carga, carne saico:
sauco y sus propiedades desinflamatorias!
Mil novecientas sesenta conchitas para profanadores,
transgresores y caínes y abeles descastados.
Confesiones de un saico cat: sauco,
sambuco, para desinflamar las hemorroides:
saico, sauco cat: sauco cow boy:
vibraciones.
Sauco boy and girl & a devil:
Sangre caliente en la colita: Inga:
salvajes conchitas, vibraciones middle class:
la cama sin perder el meneito.
Paullete, peligros en la cama:
horas perdidas, conchitas abultadas:
esclavas blancas, confesiones y escoria sauco:
conchitas, mil novecientas sesenta vibrantes conchitas
& embeleso,
madmanes de gran velocidad: saucos
desinflamantes, middle class
sin perder el meneito.
Charles Bukowski & that woman
Y lo conocí.
Sí lo conocí, y bueno, no le dije crápula, pero casi.
Y que me le voy encima,
a quitarle los puntitos negros, los barritos:
extraer celosamente esa sustancia blancuzca y deleznable,
dilatarme en la exprimidera, a veces en el coche,
el tianguis, la cocina y en medio de ese placer, coger.
Hasta que el hombre se quedó sin puntos que exprimir
y un poco sin mi amor.
Hallé los pelitos que salían de sus orejas,
de su nariz, los saqué uno a uno con las pinzas:
los arranqué, ¡qué sensación!
con las pincitas, hasta que se quedó sin pelitos
¡Lástima! Pensé.
Sin barros ni pelitos.
Lo intenté, sí quise. Le sustraje
cerilla de la oreja… traté pero no pude, amarlo.
Así que agarré mis garritas y me largué
¡Que hombre tan mezquino! ¡Tan sin sustancia! Pensé.
Esa mujer
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